Ha pasado casi un mes, y tal y como predije todo se ha desarrollado de manera orgánica. He sido paciente, he escuchado a mi cabeza y mi corazón, he actuado en todo momento con coherencia y, ante todo, he sido siempre yo mismo. Como era de esperar el Sr. Cronos se fué encargando de definir el lugar que le correspondía a cada pieza, mientras yo era quien decidía si dicha disposición era la correcta. Y así iban pasando los días, tranquilos, felices, viendo como todo evolucionaba sin grandes sobresaltos mientras las señales forjaban un camino cada vez más claro. A pesar de la presencia de elementos de distinta índole, parecía al fin que las señales convergían todas en un mismo punto, alejando cada vez más cualquier otro destino accidentando...
Pero, aún estando así de preparado y predispuesto uno nunca puede estar del todo seguro, si no se enfrenta antes al mayor de sus fantasmas. Toda esta construcción podía venirse abajo de un plumazo por no cerrar correctamente ciertas puertas del pasado. Y así fue cómo, la semana pasada, decidí hacerlo. Tras varias conversaciones un evento, viernes tarde...y súbitamente de nuevo, revulsivo emocional. Viejos fantasmas, vuelta de pensamientos de esperanza, todo lo conseguido y aprendido este mes se tambalea... siento MIEDO
Pero, por suerte, la VERDAD y el SENTIDO COMÚN se antepuso a esta vorágine de sentimientos y sensaciones...en ese mismo día.
De nuevo, todo claro.
Por primera vez, todo MÁS claro.
El pasado, POR FIN en el pasado.
Y el futuro tranquilo, por un presente seguro
Tras un fin de semana a recordar, una nueva semana ha comenzado, me siento solo a hacer balance, a meditar en todo lo ocurrido, a reorganizar pensamientos, señales y acciones. Y entonces es cuando, tras mucho analizar, por primera vez tomo una decisión. ¿Por qué me atrevo por fin a hacerla? Porque se que es la CORRECTA.
The End is the Beginning...
