miércoles, 18 de enero de 2012

Puntos suspensivos

Han pasado apenas dos semanas desde que empezó el 2012. Han sido días frenéticos, de mucho curro, de últimas salidas, de volver a clase, de reencontrarme con gente... Hacía tiempo que no sentía de verdad en mis carnes el término CANSANCIO. Y sin embargo, no he sentido ni pesadez ni tristeza...el famoso y tan acusado síndrome postvacacional que siempre suele entrarme, por primera vez no ha aparecido. Se puede decir que ha sido una entrada del año de lo más positiva, concentrándome en aquello verdaderamente importante y aplicando mi fuerza y energía en todo aquello que hago.

Todo esto se hizo palpable en las mil y un conversaciones que he tenido con todo el mundo. A la típica pregunta "¿cómo estás?" yo siempre respondía lo mismo: "Cansado por el curro, pero muy contento" y siempre con una sonrisa en la cara. Parecía que realmente TODO me iba bien... pero, como siempre, este halo de completa y absoluta plenitud era más una apariencia que otra cosa. ¿Por qué? Cuando el único aspecto negativo que te está afectando en presente absoluto tiene que ver solamente con tus sentimientos hacia otra persona, no lo compartes con todo el mundo...solo con aquellos que realmente tienen tu confianza. Pero, por desgracia el compartirlo, al contrario de lo que se tiende a pensar, no ayuda a mitigar el dolor. En ocasiones incluso llega a aumentarse, haciendo que el tema poco a poco vaya creciendo hasta cobrar dimensiones megalómanas dentro de tu cabeza... hasta llegar a ese límite en el que tu estado anímico se ve más afectado por ese ÚNICO aspecto que por todos los demás. Llegué a ese punto hace dos días, un lunes que, según los expertos, es el día más triste del año (Blue Monday) Hoy es miércoles, y siento como si dicho día aún no hubiera terminado. Siento como, por ahora, está realmente fuera de mi alcance hacer desaparecer el sentimiento que me provoca esta frustración. Como siempre, es el Sr. Tiempo el encargado de que todo esto se disipe. Que aparezcan más experiencias, que surjan nuevas y excitantes personas que me hagan olvidar a la que está en mi cabeza. Realmente estoy en proceso de olvidar. Me estoy encargando de conocer a más gente, de intercambiar encuentros...pero en el fondo no quiero hacerlo. Quiero saber qué pasa por su cabeza. Quiero que me diga la frase definitiva. Quiero poner un punto final o un punto y seguido. Pero cuando solo hay SILENCIO de por medio solo puedo ver puntos suspensivos...

:(



No hay comentarios: